Reynosa, Tamaulipas.– La Casa del Indigente se prepara para recibir, durante la temporada invernal, a las personas que necesitan un lugar seguro para resguardarse de los frentes fríos que se aproximan, especialmente quienes se encuentran en situación de calle.

En este espacio se ofrece donde dormir, cobijas y comida caliente, garantizando atención básica a quienes no cuentan con un refugio. De manera regular, la Casa del Indigente atiende alrededor de 50 personas, pero durante el invierno la cifra aumenta considerablemente debido a las bajas temperaturas.

El centro también mantiene abiertas sus puertas para recibir donaciones de ropa de frío, cobijas y alimentos, con el fin de cubrir la demanda que se registra en esta temporada.

Las autoridades han reiterado la importancia de la participación ciudadana para apoyar estas acciones de asistencia.